sábado, 28 de febrero de 2009

Texto de Samuel Huntington

Uno de los problemas más importantes de los países árabes ha sido la debilidad de sus estados. Los musulmanes en general no entienden el estado moderno tipo occidental con la separación de sus tres poderes: ejecutivo, judicial y legislativo, ni tampoco el concepto de laicidad con la separación entre religión y política. Huntington define a las sociedades occidentales como una U invertida tribu o familia estado-nación religión Mientras que los países árabes tienen una estructura de U en donde predominan la tribu y la religión y queda minimizado el estado-nación una de las principales caracteristicas de nuestra civilización Occidental. He aquí el texto de Samuel Huntington sobre este importantísimo problema del mundo árabe-islámico.

La estructura de lealtad política entre árabes y, más en general entre musulmanes, ha sido en general la opuesta de la de Occidente moderno. Para éste, el Estado nacional ha constituido el súmum de la lealtad política. Las lealtades más limitadas están subordinadas a ella y quedan subsumidas en la lealtad al estado nacional. Los grupos que trascienden los Estados Nacionales –colectividades lingüisticas o religiosas, o civilizaciones- han impuesto una lealtad y un compromiso menos intensos. Así, en un continuo que vaya de las entidades más reducidas a las más amplias, las lealtades occidentales tienden concentrarse en el centro, de manera que la curva de intensidades tiende a concentrarse en el centro, de manera que la curva de intensidad de la lealtad forma en cierta medida una U invertida. En el mundo islámico, la estructura de lealtad ha sido casi exactamente la contraria. El Islam ha tenido un centro hueco en su jerarquía de lealtades. Como ha dicho Ira Lapidus, “las dos estructuras fundamentales, originales y persistentes” han sido la familia, el clan y la tribu, por un lado, y las unidades de cultura, religión e imperio en una escala cada vez mayor”, por el otro, “el tribalismo y la religión (islam) desempeñaron y desempeñan todavía”, decía así mismo un investigador libio, “un papel significativo y determinante en los acontecimientos sociales, económicos, culturales y políticos de las sociedades y sistemas políticos árabes. De hecho están entrelazados de tal manera que son considerados los factores y variables más importantes que configuran y determinan la cultura política árabe y el espiritu político árabe”. Las tribus han sido fundamentales para la política de los estados árabes, muchos de los cuales, como dice Tahsin Bashir, son simplemente “tribus con banderas” . El fundador de Arabia Saudí, tuvo éxito, en gran parte, gracias a su habilidad a la hora de crear una coalición tribal a través del matrimonio y otros medios, y la politica saudí ha seguido siendo una política en buena parte tribal en la que los sudaris están enfrentados a los Xamar y a otras tribus. Al menos dieciocho tribus importantes han desempeñado papeles significativos en la evolución libia, y se dice que en Sudán viven unas quinientas tribus, la mayor de las cuales abarca el 12% de la población del paìs.